Así nació adican

Una historia real. Un propósito claro.

Soy Víctor Mañero, fundador de ADICAN.

Y si hoy estás aquí, quiero contarte algo personal. Porque antes de ser adiestrador canino, fui simplemente una persona que necesitaba ayuda… y la encontré en los perros.

Los perros me salvaron la vida. Literalmente.

Tenía 16 años cuando sentí que ya no podía más. El acoso escolar, la tristeza, el vacío… todo me superaba. En ese momento oscuro, fueron los perros quienes me sostuvieron. Me devolvieron la calma, el presente y las ganas de vivir.


Pero mi historia con ellos no empezó ahí. De pequeño, los médicos dijeron que no iba a poder caminar. Fue un caniche con el que, comencé andar, tras morderme jugando a diario el pañal y empujarme hacia arriba para lanzarme a caminar, como si fuera su juguete y así me empujó a dar mis primeros pasos. Desde entonces supe que los perros venían a enseñarme algo más grande.


Sí, tengo alergia al epitelio del perro y a pesar de no haber vivido una vida fácil, cargada de cambios, mudanzas, cambios de trabajo, cambios de residencia, romper patrones familiares sobre a que dedicarme profesionalmente, decidí dedicar mi vida a ellos. Porque entendí que no eran solo animales, son maestros, compañeros y terapeutas silenciosos, como podrás leer en mi libro en Amazon "Método CPC: Coaching Personal Canino. Educa a tu perro desde tu transformación personal.

Así nació ADICAN. Desde la piel. Desde el alma.

ADICAN es mucho más que una marca o una escuela de adiestramiento. Es el resultado de mi historia. De haber tocado fondo, de haber profesionalizado mi pasión en aquel momento duro que vivimos todos en 2019, cuando no tenía ni 1€, me faltaban meses para ser padre y estaba ante una profesión tradicionalmente presencia. He aprendido y quiero enseñarte que los perros no tienen el problema… reflejan el nuestro.


Por eso creé el Método CPC – Coaching Personal Canino. Porque no se trata solo de que tu perro obedezca. Se trata de que haya equilibrio, conexión y respeto entre ambos. Y eso empieza en ti.

¿Por qué hago esto? Porque lo viví. Porque funciona.

He acompañado a más de 5.000 perros y familias en los últimos 15 años. Y en cada historia, vuelvo a reconocer la mía.


Cada vez que alguien me dice “mi perro me supera”, yo lo entiendo. Porque también me sentí así. Y cada vez que alguien descubre que el cambio empieza en uno mismo, sé que estoy donde tengo que estar.

Un dibujo en blanco y negro de un perro y un corazón.

Es transformar tu vida junto a tu perro.

Un dibujo en blanco y negro de la cabeza de un perro sobre un fondo blanco.

Es dejar de luchar y empezar a entender.

Una mano sostiene la cabeza de un perro en su palma.

Es compromiso, cercanía y resultados reales.

Un dibujo en blanco y negro de dos huellas de patas sobre un fondo blanco.

Es comunidad, apoyo y evolución.